3D – Imaginación sin límites
La manera de plasmar las ideas que corren por nuestras cabezas ha cambiado mucho gracias a los avances tecnológicos, ahora podemos mostrar a los demás todo lo que vive en nuestra mente y una de las principales herramientas para hacerlo es el modelado 3D, pero ¿alguna vez te has preguntado qué es, qué significa o cómo se hace? Si es así, hoy es tu día de suerte, Podemos ayudarte con eso. Toma asiento, ponte cómodo, vamos a empezar.
Empecemos por responder la pregunta básica, ¿Qué es el 3D? Su significado es en realidad muy intuitivo, significa tridimensional, es decir, que tiene tres dimensiones o valores: anchura, altura y profundidad —a diferencia del 2D, que solo trabaja con alto y ancho—.
En los espacios con tres dimensiones hay interacciones físicas, como lo son la luz y la sombra, lo que crea volumen y nos ayuda a percibir mejor la apariencia de un objeto. Conociendo esto, vamos a enfocarnos en la animación 3D.
Como en cualquier proyecto creativo todo comienza con una idea, un boceto, una intención, que se pule y se perfecciona. Una vez clara nuestra idea debemos crear nuestro modelado en tres dimensiones.
¿Ahora qué sigue? El proceso UVs, una representación de nuestra figura en dos dimensiones, o 2D, que nos ayuda a pintar texturas sobre el modelo 3D.
El texturizado es muy importante, incluso más que el propio modelado 3D, pues nos ayuda con la parte estética. Con él podemos obtener un modelo increíblemente detallado y hermoso, pero debemos tener cuidado, pues una mala aplicación de texturas hará que pierda toda su belleza, o por lo menos gran parte de ella. Por el contrario, si tenemos un modelo muy básico, pero con buenas texturas, el resultado es impresionante.
No olvidemos la iluminación, que nos ayuda a dar profundidad. En este punto debemos colocar una luz que nos sirva para aparentar la posición del sol y unas cuantas más que nos permitan generar los rebotes de esa luces.
Ya que hicimos tooooodo eso, llegó el momento de exportar. Vamos a generar el render, advertencia, esto puede tardar… ? ¡o tal vez no! Porque gracias a las nuevas tecnologías tenemos la posibilidad de hacer un render en tiempo real. De hecho, este método inicialmente se aplicaba para los videojuegos, luego fue adoptado por el cine por ser mucho más rápido, barato ¡y con excelentes resultados!
Oh, pero aquí no termina, mi querido Padawan. Continuemos.
Una vez que nuestro video fue exportado, sigue la postproducción. No te asustes, solo son las correcciones de color y los elementos extras que vaya requiriendo tu proyecto, ya sea motion graphic, algún VFX, textos simples o animados, etc.
Para finalizar, agregamos el diseño sonoro, la música y voilà. ¡Así de fácil!
Ok, ok… tal vez no es tan sencillo, pero definitivamente es un proceso increíblemente creativo que sí requiere mucha especialización, pero que te permite crear lo que tu mente desea ver hecho realidad, tu imaginación es el límite.
By Ariel Terrones.
Redacción Miguel Ocampo.